Mitigación de radón chalet adosado en Torrelodones – Caso real en 2020

En 2020 llevamos a cabo una intervención de mitigación de radón en una vivienda unifamiliar adosada,  construida en 2000. La superficie construida de la vivienda de 506 m².

Las mediciones previas, acreditadas según la norma ISO 17025, indicaban una presencia elevada de gas radón en el interior del edificio:

• 630 Bq/m³ en la planta baja

Diagnóstico y estrategia de intervención

Dadas las características constructivas de la vivienda y el nivel de afectación, se diseñó una solución personalizada de rehabilitación frente al radón, que permitiera actuar sobre el subsuelo. Dado el tipo de construcción y la distribución de presiones bajo losa se tuvo que intervenir en el interior.

¿Cómo eliminamos el radón en este caso?

La intervención consistió en realizar un lóbulo de depresión de aproximadamente 1 m³ de volumen mediante excavación interior para acceder al subsuelo por debajo de la losa y perforación en la fachada trasera del edificio.  Se instalaron los tubos de captación que se conectaron a un sistema de depresión del terreno, diseñado para extraer el gas radón antes de que penetrara en el interior. Las edificaciones adosadas pueden tener mayor complejidad a la hora de mitigar el radón ya que en algunos casos comparten forjados con los vecinos.

Resultados tras la mitigación

Las mediciones posteriores, también acreditadas bajo la norma ISO 17025, confirmaron la eficacia de la intervención:

• 29 Bq/m³ en la planta baja

La eficacia de esta mitigación de radón fue del 95%, logrando niveles seguros y sostenibles para la salud de los ocupantes.